Esta es una receta tradicional italiana con un sabor increíble! Solo lleva buen aceite de oliva, ajo, zumo de limón, picante en hojuelas, pimienta negra, perejil y queso parmesano. Para prepararla, solo hay que seguir el paso a paso!
Ingredientes
Poner la pasta a cocinar en agua hirviendo con suficiente sal, según las instrucciones del fabricante.
Debe quedar al dente pues va a seguir cocinándose unos minutos más con la salsa. La mía la dejé 10 minutos.
Detalle corte de los ajos.
Mientras la pasta se está cocinando, comenzamos a preparar la salsa. Se pone en una olla a fuego medio alto el aceite de oliva. Agregar el ajo en láminas. Dejar sofreír un poco, cuidando que no se vaya a quemar.
Incorporar el chile seco.
Pasado el tiempo de cocción de la pasta, se retira con una cuchara escurridora y va directamente a la olla de la salsa.
Es importante no botar el agua donde se cocinó la pasta.
Agregar 1 y 1/2 tazas del agua de la cocción de la pasta y el zumo de 1/2 limón amarillo.
Se incorpora el perejil picado. Mezclar bien todo, verificar sabor.
Dejar cocinar todo junto por un par de minutos o hasta que la pasta esté perfectamente cocida.
Servir como plato principal o como acompañante con queso parmesano rallado, perejil picado, pimienta negra recién molida y si se quiere un toque más de chile seco en hojuelas y un chorrito de aceite de oliva si hace falta.
Es importante no botar el agua de la cocción de la pasta, servirá para espesar la salsa y darle el toque de sal.
No hay que poner sal adicional si no es necesario, el queso parmesano tiene suficiente y podría quedar demasiado salado si no se tiene en cuenta este detalle.
Guardar dos tazas del agua en que se cocinó la pasta, yo le pongo a la salsa 1 taza y 1/2, agregar poco a poco y reservar media por si llegara a hacer falta.