Mi abuelita hacía muchas tortas para aprovechar lo que le sobraba o para gastar los vegetales o frutas que estaban por perderse. Recuerdo que todas le quedaban riquísimas! Hacía torta de pan, de espinacas, de plátano y por supuesto de zanahoria entre muchas más.
No se si las hacía en el horno o en una sartén en la estufa pues la verdad es que en Colombia el horno siempre está en nuestras cocinas pero no se hornea, tiene otros usos, como por ejemplo de alacena para guardar ollas y sartenes, es la verdad! Espero que al pasar de los años se le esté dando el uso correcto porque es una herramienta maravillosa a la hora de cocinar.
Tengo que confesarles que desde pequeña no se por qué motivo no me gustaba comer la zanahoria cocida, de la única manera que la probaba era en la Torta de Zanahoria que preparaba mi abuelita y eso que no soy muy dulcera que digamos, pero aún así es una de mis favoritas de todos los tiempos! Nunca tuve su receta pero es de esas cosas que se me quedaron grabadas por siempre en la memoria, ese aroma, la suavidad, ese sabor… Por eso me dí a la tarea de aprender a prepararla, primero porque me transporta de inmediato a la niñez, a los recuerdos y porque no puedo resistirme a este antojo! Siempre es un placer tomar una taza de café con una buena tajada de torta tibia.
Hice varios intentos por lograr una torta muy rica pero no fue nada fácil, muchas veces fueron verdaderos desastres! Poco a poco he ajustado los ingredientes y esta me ha encantado por eso la he querido compartir!
A veces pongo la mezcla en moldes individuales pero me gusta más la presentación un solo molde, queda espectacular! En Colombia no acostumbramos a ponerle una cubierta de queso con más grasa y mucho dulce como se decora tradicionalmente. En realidad no es necesario, si se quiere se le agrega un poco azúcar impalpable pero así sola es perfecta.
Lo que más me gusta es que no es tan dulce, queda con la consistencia justa, las tajadas salen perfectas, con ese crocante de las nueces, un sabor delicioso y el aroma es espectacular! Aquí les dejo mi receta, espero que les guste, que la compartan y la disfruten tanto como yo!
Nada más delicioso que nuestra bebida favorita acompañada de una buena tajada de Torta de Zanahoria. Exquisita y con una textura perfecta. Un antojo que no se pueden resistir, solo hay que seguir el paso a paso!
- 4 huevos
- 1 taza azúcar blanca o morena
- 1 taza aceite vegetal de canola preferiblemente
- 3 cucharadas yogurt sin sabor y sin azúcar
- 2 1/2 cucharaditas tintura de panela (molasses)
- 1 cucharadita esencia de vainilla (extracto)
- 2 cucharadas miel
- 2 tazas harina de trigo regular
- 2 cucharaditas polvo de hornear
- 1 pizca sal
- 1 cucharadita cocoa en polvo sin azúcar (opcional)
- 1 cucharadita canela en polvo o al gusto
- 1 cucharadita jengibre en polvo o al gusto
- 1 taza zanahoria pelada y rallada por el lado grueso o cortada finamente
- 1/2 taza uvas pasas (opcional)
- 1/2 taza macadamias u otro tipo de nuez
- 1/4 taza zumo de naranja
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Batir con batidora eléctrica o manual los huevos y el azúcar a velocidad media hasta que estén integrados.
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Parar la batidora y con una espátula raspar los lados y el fondo del recipiente.
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Seguir batiendo, agregar el aceite poco a poco.
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Luego se incorpora la miel, el zumo de naranja, la tintura de panela (molasses) y la esencia de vainilla.
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Cernir primero la harina de trigo.
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Luego en el mismo recipiente y sobre la harina, se ciernen los demás ingredientes secos (cocoa, polvo para hornear, canela, jengibre y sal). Mezclar un poco.
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Ir agregando a la batidora la mezcla cernida a velocidad baja.
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Parar la máquina y remover con la espátula si es necesario. Agregar el yogurt y batir hasta que todos los ingredientes se mezclen bien.
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Bajar el recipiente de la batidora, la mezcla debe tener una consistencia espesa.
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Agregar la zanahoria rallada, las nueces y las uvas pasas.
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Revolver bien con espátula de manera que todo quede bien mezclado.
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Engrasar bien un molde.
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Verter la mezcla en el molde. Dar unos golpes al fondo del molde contra una superficie plana para que la mezcla quede bien repartida.
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Llevar al horno precalentado a 350ºF (180ºC) por 50 minutos o hasta que al introducir la punta de un cuchillo o un palillo salga limpio.
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Dejar reposar la torta por 60 minutos o más, hasta que esté fría antes de desmoldar.
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Cuando esté totalmente fría se desmolda y si quieren le ponen un poco de azúcar impalpable. Ojo, si la torta está tibia, se absorberá el azúcar.
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Tajar y servir con su bebida caliente o fría favorita.
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También pueden poner la mezcla en moldes individuales bien engrasados por 25 minutos o hasta que al pinchar la punta del cuchillo salga limpio.
El aceite debe ser vegetal y de sabor neutro, por eso se usa el aceite de Canola para este tipo de preparaciones.
